El equipo de empleo de RFB ha actuado con éxito en nombre de un conductor de carretilla elevadora que fue suspendido y luego despedido por su empleador por denunciar la carga peligrosa de palets en un almacén.
Los hechos
El demandante manejaba una carretilla elevadora para mover un palé cuando cayó a una altura de 9 metros. Esto se debió a que estaba peligrosamente cargado con paquetes que sobresalían del palé y se mantenían unidos con celofán. Los paquetes pueden pesar unos 500 kg, por lo que la caída del palé podría haber tenido consecuencias fatales para los trabajadores de la planta inferior del almacén. El demandante informó inmediatamente del incidente a uno de sus supervisores, pero no se tomaron medidas ni se documentó el incidente. Unos días más tarde, el demandante observó otro palé sobrecargado y volvió a informar a su supervisor, pero le dijeron que siguiera trabajando.
Cuando el demandante vio otro palé sobrecargado, sacó su teléfono móvil de la taquilla y lo utilizó para fotografiar el peligro. Posteriormente mostró estas fotos al responsable de Salud y Seguridad.
Ese mismo día, el demandante fue suspendido. El empresario alegó que lo había hecho por utilizar su móvil en el almacén durante las horas de trabajo, infringiendo sus normas. El demandante fue llamado unos días más tarde y fue despedido durante la llamada, sin seguir ninguno de los procedimientos disciplinarios contractuales del empresario.
La decisión del Tribunal
El Tribunal consideró que el hecho de que el demandante informara de los peligros que presentaban los palés sobrecargados constituía una revelación cualificada. EJ Havard declaró que "debe ser de interés público si el objetivo de la divulgación era [garantizar] la salud y la seguridad de los trabajadores". Al fotografiar los palés, se consideró que el demandante había manifestado su preocupación al empresario por medios razonables. Sus acciones fueron apropiadas para protegerse a sí mismo y a otros trabajadores.
Al Tribunal no le convenció la alegación del empresario de que el despido estaba relacionado con el uso indebido del teléfono móvil por parte del demandante. Decidió que la suspensión del demandante constituía un perjuicio. El Tribunal también concluyó que el motivo del despido del demandante estaba relacionado con el hecho de que hubiera revelado problemas de salud y seguridad.
El Tribunal consideró además que el demandante tenía derecho a percibir una retribución por el periodo de suspensión, y que el hecho de que la demandada no le pagara durante ese periodo constituía una deducción ilícita del salario. Por último, el despido del demandante constituyó un incumplimiento de contrato, que le daba derecho a una indemnización de 4 semanas de preaviso de conformidad con su contrato.
El Premio
El Tribunal concedió al demandante una indemnización por un importe total de 15.019,46 libras esterlinas, que incluía una cantidad de 3.000 libras esterlinas por daños agravados debido a que el empresario se había comportado de una forma que podría calificarse de insultante.
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Publicado el 4 de julio de 2022